Despertó la ofensiva cangrejera, y en el mejor momento posible.
Una quinta entrada de siete carreras de los Cangrejeros de Santurce fue decisiva en el resultado final, y los crustáceos pudieron aguantar un furioso empuje final de los Lobos de Arecibo para finalmente derrotarlos, 12-10, frente a 1,098 personas en el estadio Hiram Bithorn.
Fue el primer juego de la temporada entre los dos equipos mejor ubicados en la tabla de posiciones de la Puerto Rico Baseball League y con el triunfo, los crustáceos se coloca medio juego del puntero.
Arecibo no jugaba desde el pasado viernes debido a la cancelación de tres partidos seguidos por lluvia, cometió un total de tres errores y despertó a una ofensiva cangrejera que se había mantenido silente en lo que va de temporada.
Las 12 carreras de los Cangrejeros fueron su total más alto en lo que va de campaña. Incluso, Santurce sólo había sobrepasado las cinco carreras en un partido una sola vez en lo que va de temporada. Con la victoria, Santurce acumula marca de 9-6, y se acerca a tan sólo medio juego de los Lobos, que caen a 8-4 y siguen en el puntero.
Parecía increíble, pero la lluvia volvió a aparecerse en un partido de los Lobos. La parte baja de la primera entrada fue detenida por un aguacero que cayó en el Bithorn por espacio de 40 minutos, pero el partido pudo reasumirse con normalidad.
Los Lobos, que anotaron una carrera en la segunda y tercera entrada, se apuntaron dos más en la parte alta de la cuarta para tomar ventaja, 4-2. No obstante, una mala secuencia defensiva fue lo que le abrió las compuertas a la ofensiva de Santurce.
En la parte baja de la cuarta y con hombre en segunda y tercera base, Chris Amador conectó una roleta al campocorto Edwin Maysonet, quien lanzó al receptor René Rivera en un intento de sacar en el plato a John Pachot, que ocupaba la tercera base. No obstante, Pachot regresó a tercera y Rivera lanzó a la base, pero su tiro fue al jardín izquierdo. Todos los corredores llegaron al plato, incluyendo a Amador. ¡Pero aguanten los caballos! Tras la jugada, Amador fue cantado fuera por no tocar tercera base, y la entrada acabó con el marcador 4-4.
Llegó la parte baja de la quinta de la entrada, y empezó a lloverles a los Lobos. Pero no fue agua lo que les cayó, sino carreras. La novena santurcina anotó un total de siete carreras en la entrada, producto de cinco imparables, dos bases por bolas y un error del receptor Rivera con las bases llenas, al dejar caer un tiro de Guzmán para forzar un out. La ventaja al final de la entrada era de 11-4, y la suerte parecía estar echada al lado cangrejero.
Pero los Lobos demostraron una vez más que son el equipo más difícil de derrotar en la liga. En la parte alta de la octava, con el partido, 12-5, Arecibo envió al plato a nueve hombres, y produjo un rally de cinco carreras, pero Santurce se las arregló para parar la hemorragia de carreras y se llevó el partido.
Ángel García terminó la octava entrada y lanzó una perfecta novena para apuntarse su segundo juego salvado. Kyle Aselton (1-1) se llevó la victoria en relevo, mientras que el abridor de los Lobos, Brad Halsey (0-1) cargó con la derrota.

Tras varios días de estar alejado del diamante, José “Tony” Valentín pudo regresar ayer a su rutina prejuego.
El jugador de cuadro interior y dueño de los Cangrejeros de Santurce estuvo presente en las prácticas de bateo de la novena santurcina previas al encuentro de anoche ante los Lobos de Arecibo en el estadio Hiram Bithorn, y aunque no vio acción, se expresó aliviado de una lesión en la rodilla derecha que lo ha mantenido fuera de juego.
“Estoy de lo más bien. Hoy (ayer) fue el primer día que empecé a correr poco a poco y a coger roletas. Anteriormente todo el trabajo lo hacía afuera, en la piscina”, dijo Valentín a PRIMERA HORA.
El veterano jugador solamente ha visto acción en cinco partidos de la Puerto Rico Baseball League, luego que el pasado 16 de noviembre fuera sacado del roster activo por la lesión, que afortunadamente no fue de gravedad.
“En verdad que fue una lesión que me hizo pasar un susto, porque hace un año me había operando la misma rodilla. Pero me hice una prueba de resonancia magnética, y gracias a Dios estoy aquí”, añadió Valentín.
A pesar de los problemas físicos que ha enfrentado, Valentín se mantiene en la búsqueda de un espacio en las Grandes Ligas, donde vio acción por última vez en el 2007 con los Mets de Nueva York.
“Hasta ahora no he tenido contacto con nadie. Ahora mismo los equipos están haciendo sus reuniones en cuestión de los planes que tienen para el año que se avecina. He estado en contacto con mi agente y él me está preguntando cómo me he sentido y qué estoy haciendo”, sostuvo.
“Yo sinceramente creo que a mí me queda pelota, por lo menos uno o dos añitos más. Es cuestión de estar bien de salud y que me den la oportunidad”, añadió el apoderado santurcino.
En cuanto a sus Cangrejeros, que antes de la acción de anoche estaban en la segunda posición de la tabla con marca de 8-6, Valentín reconoció que la ofensiva aún no ha llenado sus expectativas. La novena cangrejera tiene el peor bateo colectivo de la liga, con promedio de .218.
“La ofensiva no ha sido la que yo esperaba, no hemos bateado para la alineación y los peloteros que tengo, pero estoy contento con el desempeño de los muchachos, sobre todo por el esfuerzo que han demostrado. Sé que tenemos mucha mejor ofensiva que la que hemos enseñado”, resaltó.
“Es cuestión de que algunos de los muchachos caigan en forma. Sin ellos batear hemos jugado bien, y con la ayuda de ellos vamos a ser mejores”.