Como una roca.

A pesar de una difícil temporada este año, el relevista Saúl “Monaguillo” Rivera tiene su ánimo intacto con miras a la campaña de 2010 de las Grandes Ligas.

“Fue como una montaña rusa”, expresó Rivera. “No fue un año que esperábamos… Empecé lento”.
“Pero, gracias a Dios, terminé fuerte. Aunque los números no lo dicen así, según los muchachos, sé que terminé fuerte. Y lo más importante es que estoy saludable y listo para el año que viene, con lo que quieran venir”, añadió.

Antes de terminar el año con 6.10 de efectividad en 38 entradas y un tercio, Rivera fue enviado a las Menores y llamado de vuelta en dos ocasiones.
El recio relevista tiene su teoría más allá de las explicaciones públicas del equipo.
 “Como tenía una opción (de contrato para el próximo año), la aprovecharon y me mandaron a Triple A, supuestamente para que trabajara, pero estaba consciente que no era eso, sino que era como una estrategia, porque voy ahora para arbitraje. Dicen que eso lo hacen para bajar el valor del jugador”, indicó Rivera. “Si me quieren, estamos ahí. Quiero quedarme con Washington, pero eso sí, mi meta es estar en Grandes Ligas”, sostuvo.

Para lograr sus planes de una campaña sólida en el 2010 destacó la importancia de un buen desempeño con los Criollos de Caguas en la Puerto Rico Baseball League.
“La liga de Puerto Rico siempre me ha ayudado. Voy a ayudar al equipo en lo que pueda. Eso me mantiene en la condición para estar listo para la próxima temporada”, afirmó Rivera. “Si me dan la oportunidad (en Washington), voy a hacer mi trabajo, como siempre. Es cuestión de que me den la confianza otra vez. Quiero demostrar que todavía queda Monaguillo pa’ largo”.