GLENDALE, Arizona -- Para contar con un ataque balanceado, como el que los Medias Blancas esperan tener en el 2010, puede ser difícil señalar a un jugador en particular que sea la clave.
Sin embargo, dos posibles candidatos pueden ser el boricua Alexis Ríos y Carlos Quentin.
"Estoy consciente de eso, y estoy seguro de que Alexis también. Eso no nos molestará", declaró Quentin antes de los entrenamientos del equipo completo de los Medias Blancas.
"Cuando comiencen los juegos, todo será más sencillo", dijo Quentin. "Lo tomaremos turno por turno. Es una responsabilidad que todo pelotero quiere tener y es una muestra de que el equipo cree que tienes el potencial de tener un gran desempeño".
Chicago tendrá que contar con buenas actuaciones de Ríos y Quentin, ya que la fuente de poder de la temporada pasada -- Jim Thome y Jermaine Dye -- ya no está en el equipo.
Quentin viene de una lesión en el pie izquierdo, que lo limitó a 99 partidos en el 2009. Por su parte, Ríos se unió a los Medias Blancas procedente de los Azulejos en agosto y continuó su decepcionante campaña al batear .199 con tres vuelacercas y nueve impulsadas durante sus 41 juegos en la Ciudad de los Vientos.
El estar una temporada completa en el Sur de Chicago, además de la seguridad de que será el jardinero central titular desde el comienzo, podría ayudar al puertorriqueño a tener una mejor transición con el equipo.
"Definitivamente es un nuevo comienzo", manifestó Ríos. "Ya eleminé las dudas que tenía, así que estaré más relajado y tendré un buen año".
Al preguntáserle qué pasaba por su mente durante los problemas del año pasado, Ríos sonrió y dijo que le tomaría varios días explicarlo. Antes del canje, Ríos tenía un promedio de .264 con 14 jonrones y 62 empujadas con Toronto -- no son precisamente malas estadísticas, pero no a la altura de su promedio de por vida de .281.
Para que pudiera mejorar su actuación en el terreno, Ríos trabajó en privado con el coach de bateo de los Medias Blancas, Greg Walker, durante varias sesiones en Miami. Ríos reconoció que hizo muchos cambios en su estilo de bateo cuando nada le salió bien en el 2009 y ahora pretende tener un estilo que le ha dado resultados en el pasado.
Por otra parte Quentin, candidato al Jugador Más Valioso del 2008 antes de fracturarse la muñeca a comienzos de septiembre de ese año, entrenó en California durante la temporada baja para mantenerse en plena forma para el 2010. El guardabosque de 27 años se enfocó más en moviemientos explosivos, lo que no pensó que era posible de hacer en el invierno.
Durante el resto de los Entrenamientos de Primavera, a Quentin le lloverán las preguntas sobre su muñeca izquierda y posiblemente su muñeca derecha, a la que le removieron un alambre durante una cirugía en el receso de temporada. Quentin declaró que se siente totalmente bien.
Y Ríos entiende que se hablará bastante de sus dificultades del 2009 hasta que otra vez comience a brillar con el bate o hasta que no hable más del tema -- especialmente porque ganará US$59 millones hasta el 2014. Ningún jugador dijo estar preocupado por esas preguntas.
De hecho, ambos estaban de buen humor en las instalaciones del equipo en Arizona y esperan tener la misma mentalidad con un conjunto que pueda jugar por un campeonato en octubre.
"Hablaré de eso un poco", expresó Ríos. "Pero no me importa. Es parte del juego. Como dije, es un año nuevo y espero tener una buena temporada para ayudar al equipo a ganar, y el próximo año hablaremos de lo bien que me fue en el 2010".
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